Técnicas de reforzamiento positivo para tus hijos

La estimulación es bueno para tus hijos. Un ambiente que se considere rico y diverso en estímulos puede permitir que para tu hijo obtenga más experiencias del entorno y aprenda a gran velocidad, por eso, es conveniente utilizar técnicas de reforzamiento positivo para tus hijos. Sin embargo, si existe algún exceso puede ser igualmente perjudicial:

  • Un ambiente demasiado cargado de estímulos como los ruidos, luces, actividad excesiva,… puede saturar la capacidad de tu hijo para afrontar los estímulos, crear confusión y puede provocar una manifestación de signos de sobreexcitación y ansiedad.
  • Una estimulación baja puede provocar aburrimiento. Actividad como ir de compras pueden ser un gran fastidio para tu hijo. En estos casos, puede que reaccione de modo que califiquemos como mal comportamiento, debido a que su límite de paciencia y tolerancia a la inactividad no es el mismo que el de sus padres.

Antes de decidir si tu hijo se porta mal nos debemos de tomar un minuto para observar las circunstancias y poder responder estas preguntas:

  • ¿está nuestro hijo cansado, aburrido o tiene hambre?
  • ¿Tendrá algún problema médico o le está sentando mal alguna medicación?
  • ¿Se le explica y enseña como debe importarse en situaciones determinadas?
  • ¿Estamos esperando el comportamiento que se adecua para su edad y etapa de crecimiento?
  • ¿Está sobreestimulado o poco estimulado?

La situación es más complicado de lo que en principio pudiera parecer y un pequeña cambio de la situación puede arreglar el problema, conseguir que nuestro hijo se sienta feliz y el adulto esté relajado.

Técnicas de reforzamiento positivo para tus hijos
Fotografía de Hammonton Photography

Las técnicas de reforzamiento positivo son uno de las cosas más importante como estrategia de modificación de conducta para nuestros hijos. Estas técnicas no sólo sirven para evitar problemas, sino también se pueden utilizar para afianzar nuevos comportamientos a nuestros hijos. Pueden ser útiles para padres, docentes y cualquier persona que trabaje con niños o en su defecto en contacto.

El funcionamiento de estas técnicas del comportamiento sería a través de que se debe recompensar los buenos comportamientos que realice tu hijo o ignorar por completo las conductas consideradas problemáticas.

Como se puede recompensar los buenos comportamientos a través de innumerables maneras para el reforzamientos. Siempre debemos de contar con algo que nuestro hijo disfrute y valore como un premio como seria un elogio, un cariño o una sonrisa los cuales pueden reforzar positivamente, también podemos utilizar varias actividades como ir al parque, jugar en el patio, visitar el zoológico, ver una película,… o incentivos materiales como sería comprar un juguete,…

Se debe mostrar siempre gratitud con tus hijos y mostrar que estamos orgullosos de sus méritos y logros. Así, no sólo aumentaremos las probabilidades de que su comportamientos correcto se repita, sino que incentibamos unas bases de autoestima sólidos.

Al contrario, para ignorar el mal comportamiento es importante que como padres debemos aclarar que necesitan nuestros hijos y desean atención por parte de sus padres o de los adultos que los rodean. Por esto, la atención siempre funcionará como un reforzador positivo, aún si es utilizado de una manera negativa, como un castigo o reprimenda hacía ellos.

Técnicas de reforzamiento positivo para tus hijos
Fotografía de Simply CVR

No debemos caer en responder al mal comportamiento con atención, lo que obtendremos será aún más comportamiento negativo, mientras, si prestamos atención al buen comportamiento, obtendremos más buen comportamiento. Si ignoramos la mala conducto de nuestros hijos y esperamos a que se presente la conducta que deseamos, con el paso del tiempo, lograremos aumentar las veces que se presente la conducta deseada. Con probabilidad, lo más difícil será tolerar un comportamiento no deseado, por lo que está técnica requiere mucha paciencia, pero se asegura un buen resultado.

Estas técnicas de reforzamiento suelen tener buenos resultados sin se aplican de manera correcta y con cierto criterio. Debemos de entender que no todos los niños son iguales, y que las técnicas de reforzamiento pueden funcionar para unos pueden fallar para otros. Es fundamental tener constancia y coherencia con el método, y tener paciencia y cariño.

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